EL DÍA QUE FUI BILL MURRAY. Rafael Camarasa.
Ediciones Contrabando. Mayo 2021
Puedo repetirme hablando de los libros de Rafael Camarasa, no porque él se repita –cada libro añade algo más y mejor al anterior- sino porque el léxico de crítico de las narices no me va y replicarle con una ocurrencia literaria me parece pedante. Tampoco voy a decir que es mi amigo, y que allá por el 88’ ya compartíamos veladas y publicaciones: recordar no nos hace mejores ni hace mejores los recuerdos, solo nos mantiene vivos y, de paso, le da una bofetada en la cara a los que creen que todo empezó esta mañana.
Los relatos de “El Día que Fui Bill Murray” son sensacionales. Rafael Camarasa ha encontrado un equilibrio entre cierta prosa que él admira y su propio ingenio y humor negro y muy mediterráneo que es cosecha propia, como las patatas bravas de cierto bar que ya no existe (pero no hemos probado bravas como aquellas, demonios, o como diría algún falso inclusivo, dxmxnixs).
Este libro lo edita Ediciones Contrabando, que ya publicó “Lo Normal” (2017), con el mismo mimo y elegancia, y con su descarado y provocador título y portada. Si a Rafael Camarasa un día le da por escribir sobre un tipo que un día fue Bill Murray, lo puede hacer sin pedir permiso. En realidad puede hacer lo que le venga en gana, y lo hará bien. Este libro no es fruto de haber ganado ningún premio (los premios , por merecidos que sean, son caprichosos, y solo los gana uno, lo que siempre me ha parecido una memez, con lo bien que está repartir) y eso que Camarasa ha ganado un puñado, sino que es un libro de reflejar el trabajo de estos últimos años de desinformación, relaciones complicadas, corrupción y maldita pandemia. Son cuentos breves en su mayoría, y que no necesitan ni una palabra de más ni una de menos.
Sí. Podríamos hablar otra vez de Carver, Bukowski, Roth. Yo este libro lo veo más ecléctico (y eléctrico, joder, ya estamos con los juegos) y más suyo que otros. Como dijo el maestro Carver: “Get in. Get out. Don’t linger. Go on”. Y el autor se ha aplicado a ello.
Citar cuentos y no explicarlos. Que el lector lo compre o lo biblioteque. Sí, es mejor. Yo sé que hay quien no me entiende. Eso no tiene remedio. Pero para escribir cuentos tan buenos como “Circus”, “Trabajo de Campo”, “En forma de flecha” o “Sobre los finales felices” no hay que pensar en lo que se pueda entender o no, hay que trabajar y que el violín se acompase con la tuba. Y, claro, si escribes un relato muy breve como “Tomates” estás tocado por la gracia.
(Creo que me dejé de leer un relato).
Sigan siguiendo. Los libros de Rafael Camarasa. Esta es su página en el blog “La belleza es no detenerse” con informaciones y reseñas anteriores.
Fernando Garcin
Valencia, junio de 2021.
Rafael Camarasa:
«EL SITIO JUSTO». Una trayectoria literaria a la busca del sitio justo de la moral y la belleza y el lugar inesperado de las palabras.
Más info sobre Rafael Camarasa en el Blog LA SEGUNDA LLUVIA. http://lasegundalluvia.blogspot.com/2019/11/sin-noticias-de-liliput-rafael-camarasa.html
Click aquí: Blog de Rafa Camarasa
Los poemas de Rafa Camarasa siempre te sorprenden aunque te digan que ya habías sido avisado. Siempre hay algo que se escapa y es ese el sentimiento que sus poemas, al tiempo de dejarlo ir, atrapan con delicadeza. En verso, o en prosa ahora, Rafa Camarasa filma una pequeña escena de una gran película, y da su particular importancia a esa escena, que diferencia y destaca sobre la gran producción de aconteceres. No sobra una palabra, porque las palabras que sobran están ahí afuera dando brincos, en el carrusel de la vida, esperando su turno. Son poemas envolventes que dejan salir sin pasaporte pero no por ello dejan de dar cuenta de que el extranjero, cualquiera de nosotros, cruza la frontera de un lugar a otro, una frontera invisible. El poso que te deja la lectura de sus poemas es un sentimiento que estaba allí y no está (o está pero sólo por sugerencia) y te hace pensar que lo invisible es tan importante como lo visible; es la seducción por la elipse, el éxito a través del fracaso, la ternura que danza sobre la hoja afilada.
CABOS SUELTOS. ED CONTRABANDO.
Nacido en Valencia en 1963. Ha publicado los siguientes libros de poesía: Irreverentes goces menores (Universidad de Valencia, 1987), La ciudad sin mar (Editorial Aguaclara, 1991), Algunos corazones solitarios (Editorial Lunara, 1992), Cabos sueltos (Diarios de Helena,2003), Cromos (Premio Paiporta de Creación Poética, Editorial Denes, 2007) y El sitio justo (Premio Internacional de Poesía Palabra Ibérica, Punta Umbría, 2008), este último traducido al portugués. También ha publicado el libro de relatos Feos (Premio de Narrativa Breve Villa de Chiva, Editorial Denes, 2009); el libro de relatos «Lo Normal» (Ediciones Contrabando, Valencia, 2017); el premio Barcarola «Sin Noticias de Liliput» (la Rosa Profunda, Albacete, 2019), y una edición cuidadosamente revisada y reescrita por el autor de su sensacional libro de poemas «Cabos Sueltos» (Editorial Contrabando, 2018).
EL QUE MIRA (2022)
En 2022 se ha publicado por la editorial Visor su último y magnífico poemario «El que mira», XLVII Premio Ciudad de Burgos.
“Poeta siempre atento a lo grande y lo menudo, notario de nuestro deambular por este accidente vertical y transitorio que llamamos vida, Rafael Camarasa nos ofrece en El que mira una muy lúcida reflexión sobre el amor y el paso del tiempo. Bien acompañado con el epígrafe “Dentro de mi botella vacía fui construyendo un faro, mientras que todos los demás se construían barcos” de Charles Simic, que abre este libro sin alardes vacuos, sabe que “hay dolores que duelen dos veces”, y así nos lo cuenta con escritura minuciosa. Lo cotidiano, que siempre es lo esencial, es aquí la ocupación del que primero mira para luego ver. Desde su faro, el poeta da cumplida respuesta con un lenguaje bien tallado donde nada sobra” (Rafael Soler, en el prefacio a «El que mira»).
http://arquitectosdevalencia.es/contenido/presentacion-del-libro-el-que-mira-de-rafael-camarasa/
AZUL
No ser el visitante. El que llega a una casa junto al mar y queda deslumbrado por la luz, y la fresca paz de sus estancias. Hechizado por el efecto de las sombras en la vieja cal de las paredes. Ser el que se queda. Para siempre. Ese es mi sueño. Despedir a los que se van, en la ventana. A los que abandonan la casa. A los que salen de mi quimera.
(c) Rafael Camarasa, ‘El Sitio Justo’, todos los derechos reservados.
Premio Internacional de Poesía Palabra Ibérica, 2008.
EL LEJANO OESTE
Como un buscador de oro
cribo lentamente los días
y sólo de vez en cuando
encuentro el metal precioso.
Un mínimo brillo en la arena
que me reconcilia con el río
y, sin otorgarme riquezas
ni librarme de la corriente,
honra mis pies en el agua
y tanta tierra removida.
(c) Rafael Camarasa, 2.004, todos los derechos reservados.